Instrucciones inútiles para esperar en los no-lugares.
Todo vienen siendo remedios tristes,
Tazas de café,
Las maneras de esperar más tontas del Mundo
Vienen siendo vasos medio llenos
Como consuelos infalibles, o elixires de la felicidad,
Una puertita por la que se libera la nostalgia;
Todo acaba por ser un laberinto,
Un cansancio acumulado entre calles y puentes
Que separan las cosas;
Y creo recordar que dí todo lo que tuve, pero a veces
Los ríos metafísicos no son suficiente
Y lo único que queda es abrir las manos,
Dejar caer las cartas que escribí, encender un cigarrillo,
Por si así, por si acaso,
Y todo es un andén terrible de estación,
Y la felicidad es un juguete roto,
Una pista, una huella:
Las maneras de esperar más tontas del Mundo.
viernes, 16 de octubre de 2009
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